El
25 de julio de 1976 una nave de los EE.UU. de nombre Vikingo 1
fotografió una sorprendente formación en la superficie de Marte. Medía
aproximadamente unos 1,5 kilómetros de largo y tenia mucha semejanza a
la cara de una mujer, la fotografía produjo un revuelo en todo el
mundo, casi todos los periódicos y revistas publicaron las fotos en su
paginas.
Los astrónomos dijeron que las imágenes del planeta rojo era un truco
totalmente accidental de la naturaleza. Los especialistas de la sede en
Boston Analytic Ciencias creó una imagen en 3D. Después de haber
intensificado el contraste en la sombra de la parte derecha de la
imagen los especialistas encontraron un segundo agujero situado a unos
100 metros por debajo de la nariz.
Según el resultado de los análisis, los especialistas llegaron a la
conclusión que esta formación anómala no podía ser de origen terrestre.
Por otra parte, los ingenieros Vicente Dipietro y Gregory Malenaar
encontraron otra imagen de la cara en los archivos de fotografía de
Marte. Lo fotografía fue tomada con diferente iluminación 35 días
después, esta rebelo nuevos detalles, en esta toma se pueden detallar
los dientes, el globo ocular, y el sol dibuja una mejilla.
La conclusión de los ingenieros es que, si esa formación perfecta de
una cabeza es de origen natural, la naturaleza tendría que ser una
criatura razonable.
Posteriormente le siguieron haciendo diferentes fotografías a la
silueta en 1995 y también en el 1998, donde las imágenes fueron tomadas
a 1870 kilómetros de altura. Llegó para todos la gran decepción, las
fotos representaban desigualdad en el paisaje, no se podía apreciar
nada que se pareciera a una cara en absoluto.
Por su puesto uno puede pensar que funcionarios de la NASA manipularan
las imágenes, que podría ser la explicación más simple para el asunto,
bueno la historia de Marte esta llena de misterios, y podremos
especular siempre que queramos, eso sí, con las tomas fotográficas que
nos permiten ver.